LOS ARGONAUTAS SIN JASÓN

Pacheco es un trágico. A la misma altura de una tragedia griega o de cierta historia peruana que se nos da por contar. El presidente electo de la “U” cuenta con el poder y el dinero suficiente para traer y atraer a buenos jugadores, conformando un equipo respetable. Pero a su vez no tiene el tino, ni la suficiente inteligencia para saber hasta dónde llega este poder. Pacheco puede reunir la excelencia, hacer que confluya, pero lo que no puede hacer, es transformar la mediocridad en excelencia.

En un campeonato que se presenta corto, da trabajo a un mal técnico. Se configura como un mesías, pero desconoce que su lázaro sigue oliendo igual de mal que el año anterior y tal vez peor. El muerto luce más muerto, pero nadie tiene la entereza de comunicárselo. En un equipo de egos inflados por el propio presidente, mantiene en el cargo a un entrenador que ha demostrado no saber lidiar con jugadores importantes. Del Solar es malo como DT y malísimo a la hora de mantener en orden a un grupo. Quita poder a quien se lo merece y divide la capitanía de la “U” como si fuera un trofeo a repartir entre muchos. Intenta remediar su falta de piso trayendo y rodeándose de históricos del club. Busca hacer historia con el pasado y es tan necio que no sabe que el pasado no da puntos extra en una clase de historia.

Las decisiones erradas del entrenador no son exclusivas al ambiente que vive el equipo antes y después de cada partido, sino que también se dan durante los encuentros que disputa Universitario de Deportes en el campeonato.

Así en la primera fecha retrocede a Vitti a la primera línea de volantes para crearle un espacio a Ismodes. Manda a galeras a quien debe mandar en cubierta y a quien debe restregar el polvo de sus lesiones pasadas le ordena brillar sin ser estrella. Esconde el oro en la mina, lo entierra, lo pierde y saca el carbón a la palestra sin que éste tenga atisbos de querer ser aún diamante. Aquello ni siquiera es un sacrificio vano, sino simplemente es asesinar y matar el fútbol de un equipo que busca los tres puntos.

En Iquitos ante la expulsión de Revoredo decide sacar a Toñito de la primera línea de volantes. Aquel con amarilla, naranja o al límite de la expulsión es mejor que cualquiera en su función. Alva en cambio no brilla en su puesto y tampoco realiza un buen partido hasta ese momento, pero tercamente se le mantiene en el campo. El técnico consigue regalar entonces la iniciativa y el medio al rival. Alva por su parte genera mayores peligros en su área que en área contraria al perder múltiples balones en salida. La “U” empata el partido e iguala al CNI en su mediocridad.

Son pocas fechas las que quedan para el fin del campeonato y el torneo es demasiado corto para incurrir en el mismo error de no poner fecha tras fecha al mejor equipo que se tenga. Del Solar no da la talla como entrenador de la “U” y sobre todo no da la tranquilidad necesaria a un plantel que la necesita. Pasado de vueltas en Iquitos se hace expulsar tontamente y consigue así dejar sin gobierno algo que se puede tornar ingobernable si llegasen a aflorar los egos. La “U” por el momento es el Argo de la mitología, pero su DT está muy lejos de ser el Jasón de aquella, de ser siquiera el más mediocre de los héroes. El equipo de la “U” espera por un capitán que lo lleve a su objetivo, tienen las ganas y las ansias, sólo falta la visión que los reúna en una causa común, sólo eso, pero “eso” por el momento es mucho aún. Mucho.